martes, 25 de mayo de 2010

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martes, 4 de mayo de 2010

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LECTURA 1

Bienvenidos a nuestro curso titulado “La Formación del Mundo Actual: Historia de la Cultura y Civilización Global” o FMA en siglas abreviadas. El propósito de este curso es ofrecer a los asistentes una introducción panorámica al mundo de hoy, una explicación de cómo se llegó a formar este mundo y de cómo podemos imaginar el futuro en función a los eventos del presente. Para el mayor provecho de esta enseñanza, este programa debería tomarse conjunto con nuestro otro curso, “Frente de Inteligencia, Temas de Actualidad” o FITA, ya que ambos se complementan.

Mientras que “La Formación del Mundo Actual” (FMA) enfoca en los procesos y en las transformaciones responsables por la creación del mundo contemporáneo en el que vivimos, FITA se dedica a explorar ciertos aspectos de este mismo mundo actual. Entre ambos cursos hay una relación muy estrecha de causas y efectos: en FITA vemos los efectos, es decir, el mundo vigente, mientras que en FMA vemos las causas, o sea, los procesos y eventos que transformaron al mundo desde la prehistoria hasta la actualidad.

Es de tremenda importancia entender las causas a través de las cuales el mundo ha llegado al estado (desastroso) en el que está. A su vez, es de igual importancia entender las demás culturas y civilizaciones que comparten el planeta Tierra con nosotros. Hoy en día, más que nunca, vivimos en un “Pueblo Global”, es decir, en un mundo de interdependencia política, económica, científica y tecnológica, y de influencias culturales, religiosas, lingüísticas, etc. Estamos bien lejos de los días en los cuales un país o una región pudieran llevar a cabo una política de aislamiento con respecto a sus vecinos. Hoy en día las fronteras físicas de cada país están abiertas ya sea por el tráfico lícito sujeto a acuerdos mercantiles de libre comercio, o por el tráfico ilícito de sustancias, de personas, o de productos pirateados. A su vez, cada hogar con una computadora y con una conexión a la Internet posee un portal informativo, cultural, e ideológico al resto del mundo; a través de este portal con frecuencia se nos facilita más la comunicación con individuos que nunca hemos visto y con los cuales nunca tendremos trato físico que con nuestros propios vecinos. De hecho, uno de los objetivos de nuestro programa es que aprendan a emplear con eficacia la Internet como herramienta de investigación – y no de distracción y embrutecimiento.

¿Cuál es nuestro estado actual, cómo hemos llegado a él, y qué implica para nuestro futuro? Estas son tres preguntas fundamentales cuyas respuestas radican en nuestro pasado. Piensen en la última vez que acudieron a una cita con un doctor. ¿Qué es lo primero que hace? Tomar un historial. A través del historial de los síntomas le facilita diagnosticar la enfermedad, recetar un remedio, y pronosticar un futuro: “¿doctor, me curo o me muero?” Así es para casi todo: conocer los antecedentes de un fenómeno nos ayuda a entenderlo, lo cual nos permite saber como cambiarlo – mejorarlo, mantenerlo o destruirlo – y nos facilita predecir su futuro y los efectos potenciales de nuestros esfuerzos. Aquí simplemente vamos a adaptar una metodología clínica al entendimiento de la Formación del Mundo Actual.

Preguntas importantes como: ¿Cuáles son los antecedentes históricos, culturales, ideológicos, económicos o filosóficos del racismo contra los afro-americanos en los EE.UU.? ¿Por qué la prevalencia del narcotráfico en México? ¿Por que los países Hispanos son en su mayoría del tercer mundo y los anglosajones del primero? ¿Por qué los países Latinos son Católicos en su inmensa mayoría? ¿Por que los japoneses hacen tan buenos automóviles y los americanos, que lo inventaron, no? ¿Cuáles son los orígenes del Calentamiento Global? ¿Quién fue Mahatma Gandhi, qué hizo y por qué lo logró? ¿En que consistía la Guerra Fría y que impacto tuvo en el mundo actual? ¿Quién fue Bin Laden y por qué atacó a los EE.UU.? ¿Por qué el conflicto entre los judíos y los musulmanes? ¿Por qué el conflicto entre los cristianos y los musulmanes? ¿Qué son los ‘Protestantes’, en qué se difieren de los Católicos, y por qué? ¿En qué consistía la Inquisición? ¿Quién era Maquiavelo y qué representaba su obra ‘El Príncipe’? ¿Y la obra ‘Utopía’ de Tomas Moore? ¿Qué impacto tuvo la Biblia en el mundo occidental? ¿Y el Corán? ¿Quién fue Confucio y cuál fue su impacto en las culturas del Extremo Oriente? ¿Por qué se habla portugués en Brasil y no español? Etc., etc., etc.

Cada una de esas preguntas suscita un sinfín de otras hasta que nos vemos forzados a recurrir a un pasado distante, es decir, al comienzo del ser humano, o sea, a su prehistoria. Es ahí, en la prehistoria de nuestra especie donde comenzaremos a responder a todas las preguntas que pertenecen a nuestra realidad actual. Es ahí, comenzando con respuestas ostensibles a la pregunta “¿qué somos?” donde empezaremos a entender “¿cómo somos?”, “¿cómo deberíamos ser?” y “¿cómo nos podremos transformar?

El hombre, el ser humano, es un ser que se distingue de todos los demás por ciertas capacidades de creación de conocimiento adaptivo a, y transformativo de, su medio ambiente. La creación de instrumentos de caza, de técnicas para la agricultura, la invención de la rueda, el dominio del fuego, la domesticación de animales, etc. son todos ejemplos bien antiguos de esta capacidad de creación adaptiva al medio ambiente, y transformativa del mismo. Vamos a referirnos a ese conocimiento transformativo y adaptivo como “tecnología.” Somos los únicos seres generadores de tecnología.

Pero nuestra capacidad de crear tecnología depende a su vez de otra capacidad, del resultado de una evolución cognitiva, de la adaptación evolutiva de nuestro intelecto, adaptación al que llamaremos la “imaginación.” La imaginación es la verdadera marca del ser humano, lo que nos distingue aún de los otros homínidos, aun los que se nos asemejaron tremendamente, como el ya extinguido Neandertal. La imaginación nos permite el lenguaje, y veremos el por qué; la imaginación nos permite el arte, y veremos el por qué, la imaginación nos permite – y nos exige – la espiritualidad, y veremos el por qué. Para el ser humano, la imaginación es verdaderamente la medida de todas las cosas.

No obstante estas capacidades mentales, cerebrales, el ser humano está bien sujeto a exigencias biológicas, muchas de las cuales comparte con el resto de los animales. Somos, al igual que los lobos, los delfines, las orcas, los chimpancés, y muchos otros primates, seres sociales, y esa ‘sociabilidad’ también tiene ciertas características: orden, jerarquía, comunidad, reglas, política. El ser humano es sin lugar a dudas un ser social y por lo tanto un ser político, es decir, un ser que se organiza en grupos comunitarios con fines comunes – aunque no siempre con beneficios igualitarios.

Junto con la imaginación viene la curiosidad, el cuestionamiento y el impulso a la explicación. Estos derivados de la imaginación dieron lugar a su vez a otros aspectos netamente humanos: la mitología y la religión – íntimos de la espiritualidad y de la política – y la filosofía y las ciencias – disciplinas del raciocinio y motrices de la tecnología. La palabra “civilización” proviene del latín ‘civitas’ que significa algo así como “ciudad” o “establecimiento comunitario construido,” y “ciudadanía”, es decir, estado de pertenencia al anterior establecimiento. Cuando, en el contexto de nuestro programa “Formación del Mundo Actual: Historia de la Cultura y Civilización Global,” hablamos de ‘civilización’ nos referimos a la vida del ser humano en “sociedad construida,” es decir, el conocimiento humano expresado en todos sus aspectos materiales, físicos: arte, lenguaje escrito, leyes codificadas, literatura, arquitectura, artefactos, instrumentos de guerra, etc.

La palabra “cultura” en este contexto es complementaria a “civilización”. Vemos a esta palabra a modo de sufijo en otras: agricultura, horticultura, avicultura, apicultura, etc. Cultura es el “arte de cultivar” o de desarrollar. Agricultura: cultivo de productos agrícolas, el arte de cultivar la tierra; horticultura: el arte del cultivo del jardín; avicultura: el arte del cultivo de las gallinas; apicultura: el arte del cultivo de las abejas. Por “cultura” en nuestro programa FMA nos referimos al “cultivo del ser humano” o más bien al resultado acumulativo de ese desarrollo: la música, la historia, la filosofía, etc., son muestras de ‘cultura.’ Por “cultura” nos referimos a todos esos aspectos no físicos y no materiales, que acompañan al desarrollo acumulativo del conocimiento humano, a la civilización humana.

Nuestras definiciones iniciales de ‘cultura’, ‘civilización’, ‘tecnología’, etc., son debatibles, es decir, se prestan a discusión. Conforme avancemos en nuestros temas a lo largo del programa cuestionaremos éstas y muchas otras definiciones, generando un ambiente mental y comunitario de cuestionamiento, análisis y discusión – esenciales para el progreso y el verdadero entendimiento.

¿Cuál es el propósito del programa? Simple: desarrollar las herramientas necesarias – la ‘tecnología o cultura mental’ – para entender el mundo actual. Para eso hace falta dos categorías cognitivas, es decir, intelectuales: 1) una base de información junto con 2) habilidades analíticas para luego, conforme nos dotemos de éstas, 3) adquirir un entendimiento de los patrones que se expresan en el mundo. Por lo tanto, se requiere 1) un conocimiento relevante a la vez que 2) la capacidad de manejar ese conocimiento para luego aprender a 3) poder discernir cómo los patrones pasados se manifiestan en los presentes y 4) cómo crear reportes para el análisis del futuro – es decir, “inteligencia.”

Nuestro proceso se basa en diversas disciplinas de estudio: la paleoantropología donde se estudia el ser humano en la prehistoria, en su evolución; la historia, el record escrito de acontecimientos humanos pertenecientes a una cultura y civilización dada; las religiones del mundo; la filosofía; la arquitectura; las ciencias y las matemáticas; la literatura; la guerra, etc. Nos serviremos de todas las disciplinas a nuestra disposición actual para forjar un entendimiento interdisciplinario de nuestra realidad contemporánea. Pero también nos valdremos de filmes y de documentales, los cuales servirán para ilustrar, mediante arte y reportaje audiovisual, los objetivos principales de nuestra instrucción.

El proceso no es nuevo; de hecho el ser humano siempre ha tratado de llevar a cabo el mismo tipo de análisis ‘explicativo’ y ‘predictivo’ que estamos fomentando en nuestro programa. De hecho, podríamos argumentar que la versión arcaica de nuestro FMA consistiría en lo que venimos a llamar ahora la “mitología”. La mitología es el conjunto de cuentos sobre los eventos formativos del universo y sobre las historias de seres supernaturales; los mitos formaron el primer tipo de transmisión de ‘conocimiento’ cultural ‘explicativo’ del pasado a la vez que ‘predictivo’ del futuro. El ser humano siempre ha tratado de explicar el presente en términos del pasado, y de predecir el futuro en función de su comprensión del presente.

Comenzaremos nuestro programa asignando una serie de tareas. Piquen en cada una de las palabras siguientes para encontrar, en la Internet, sus definiciones respectivas. Cada palabra está dotada de un “hipervínculo” para su conveniencia, de forma que con seleccionarla con el ‘ratón’ de su computadora debería abrirse una página Web correspondiente a la definición de la palabra en Wikipedia:

² Civilización.

² Cultura.

² Historia.

² Mitología.

² Tecnología.

² Política.

Lea las definiciones de Wikipedia y compárenlas con las definiciones funcionales que hemos aportado en el texto anterior. ¿Le parecen compatibles las definiciones? ¿Cómo se comparan? ¿Cómo se diferencian? Hagan una lista de preguntas para discutir en las siguientes lecturas o incluyan sus preguntas en forma de comentarios a esta blog.

Gracias por su participación en nuestro programa “Formación del Mundo Actual: Historia de la Cultura y Civilización Global.”